Funcionarios del Servicio de Vigilancia Aduanera, con la colaboración de la Policía Nacional, han desmantelado una organización criminal dedicada al envío de picadura de tabaco de contrabando y de medicamentos y sustancias prohibidas a través de Internet, que contaban con la participación de una empresa de paquetería y mensajería de Benalmádena.
Nueve personas han sido detenidas por presuntos delitos contra la salud pública, contrabando, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal.
Las investigaciones se iniciaron en 2022, al detectarse en distintas provincias un elevado número de paquetes de picadura de tabaco de contrabando, así como de anabolizantes y otras sustancias vigorizantes, que habían sido enviados desde agencias de transporte de la provincia de Málaga.
Así, el gran número de envíos de picadura de contrabando y de medicamentos detectados, y la escasa colaboración de alguna de las agencias de mensajería con los funcionarios, hicieron sospechar a los investigadores de la participación de las propias empresas de paquetería en los delitos de contrabando y contra la salud pública, centrándose la investigación en la operativa de una agencia en particular, ubicada en el polígono industrial de Arroyo de la Miel, en el municipio malagueño de Benalmádena.
Durante el tiempo que han durado las investigaciones, se han aprehendido 1.400 kilos de picadura de tabaco de contrabando en diversas actuaciones, valorada en 224.000 euros, además de unas 1.000 pastillas de anabolizantes y vigorizantes sexuales, y se ha procedido a la intervención de un vehículo utilizado para transportar los paquetes preparados para ser enviados.
En los registros domiciliarios se han encontrado 200.000 euros en efectivo, propiedad de la organización, que estaban a la espera de ser introducidos en el circuito legal del dinero a través de distintas operaciones de blanqueo de capitales. Tanto los detenidos, como los efectos y el dinero intervenidos, han quedado a disposición judicial.
La organización desmantelada, operaba en las provincias de Málaga y Sevilla y, en poco más de un año y medio habría realizado, al menos, 8.000 envíos con un total de 23.000 kilos de picadura de tabaco, a través de la misma agencia de paquetería y mensajería, por los que habría percibido aproximadamente 580.000 euros de beneficio.